La restauración de fotografías es el proceso de mejorar la calidad de la imagen causada por el deterioro del paso del tiempo. Este proceso permite eliminar distorsiones, manchas, ruido, grietas incluso mejorar el brillo, el color y los detalles de una imagen.
Ejercicio de restauración digital de fotografías antiguas.
Nita Trujillo es una artesana que quiere dar a a conocer, a quién tenga curiosidad, la bonita técnica del encaje de lanzadera, más conocida como Frivolité o Tatting. Trabajando desde casa y con unas herramientas muy simples es capaz de crear piezas exclusivas y preciosas utilizando diferentes técnicas como el macramé, el ganchillo y sobre todo el frivolité.
«Frivolité. Tejido muy delicado en el que se realiza una serie de nudos con un instrumento llamado naveta o lanzadera en el cual va enrollado el hilo y se trabaja con los dedos de la mano, se van formando anillos que unidos crean variados motivos, se utilizan para diversas tareas como tapetes, puntillas y bordados entre otras.» (ecured.cu/Frivolit%C3%A9)
La técnica recibe distintos nombres según el país:
– Frivolitè, en Francia
– Encaje a la lanzadera, en España
– Tatting, en Gran Bretaña
– Chiacchierino o Occhi, en Italia
– Frywolitka, en Polonia
– Orkis, en Finlandia
– Makuk, en Oriente
Se desconoce el origen de esta técnica, pero en muchos sitios afirman que cuando Marco Polo volvió a Europa de su viaje a Oriente en el siglo XIII, llevaba tapices, alfombras y otros tejidos delicados con adornos de pasamanerías llamados Makuk. Junto con estos tapices preciosos trajo también a mujeres que luego vendió como esclavas dándoles el nombre de frívolas, de aquí el nombre de frivolité, el tejido que solo aquellas mujeres sabían hacer.
Con el tiempo, esta técnica se extendió por Europa, donde se empezó a trabajar en hilo fino, brillante y de diferentes colores, para adornar vestidos y ropas blancas de la realeza y la aristocracia. Como pasaba antiguamente, aquello que se ponía de moda entre la clase alta acababa por extenderse a la gente de a pie dando paso a que los más gente supiese realizar esta práctica.
Actualmente es una técnica que muy pocas personas dominan y por este motivo es de admirar y agradecer que artesanas como Nita Trujillo, preserven este arte y lo den a conocer con piezas exclusivas como estas.
Técnica de frivolité. Collar de gala para combinar con palabra de honor.
Técnica de macramé
Técnicas de ganchillo, macramé, frivolité y crochet
Puedes seguir y ver otras piezas de la artesana Nita Trujillo en su Instagram.
Tote bags o bolsas chulas de tela (llámalo como quieras).
Después de unos días de masterclass de Textil ya me veía presentándome al programa Maestros de la Costura. Una masterclass muy productiva tengo que admitir, nunca había imaginado lo satisfactorio que es realizar una pieza de costura y lucirla.
En aquella masterclass nos explicaron la historia del textil y la costura y nos pusieron al día de la variedad de tejidos textiles del mercado y sus características. ¿Sabéis diferenciar un tejido natural de uno artificial sin la etiqueta de la prenda? Yo pensaba que si, ingenua de mi.
Después de la teoría pasamos a la practica. Primero nos presentaron a la máquina de coser y luego nos dejaron solas para que nos hiciéramos amigas. Yo le perdí el miedo rápido, nunca nos habíamos enfrentado la una a la otra a solas, porque siempre estaban mis abuelas entre la máquina y yo, pero ya nos conocíamos de antes, así que solo tuvimos que ponernos al día.
Nos dieron una loneta de algodón clarita y nos dijeron: «vamos a hacer una bolsa de tela, luego la teñiremos y la estamparemos.» Pues manos a la obra, en aquella clase convertida en taller, entre muchas risas y algún suspiro de desesperación porque las máquinas… no querían coser, hice mi primera bolsa con sus asas y todo.
Después tocaba elegir el color del que queríamos teñir la bolsa y el proceso que íbamos a seguir, haciendo reservas, humedeciendo, en seco… bueno daría para otra masterclass. Yo elegí teñir en seco y por zonas, pero no salió lo que esperaba y me quedó un precioso degradado verde.
Para finalizar, el proceso de estampado. También muchas técnicas con materiales y maneras diferentes, que si decoupage, transfer, serigrafía, pintura sobre tela… bueno, con el material y el tiempo del que disponíamos, me decanté por el decoupage, que consiste en adherir con cola especial para telas, servilletas de papel. He de admitir, que al inicio del proceso de estampado, no tenía mucha esperanza, pero la profesora trajo una barbaridad de servilletas y papeles que podíamos estampar y allí rebuscando entre las cajas y carpetas, hice un diseño que me gustó y de así salió mi primera bolsa.
Yo toda orgullosa de mi bolsa de tela estampada y tintada le hice una foto y la envié al grupo de la familia «Es que eres una artistaza» «Yo quiero una» «¡Alaa qué chula!» son algunos halagos que recibí de mi familia. Esa misma tarde llamé a mi madre por teléfono y le dije que por favor se acercara al mercado a comprarme un trozo de tela, que yo necesitaba hacer otra bolsa con más detenimiento y quería aprender más técnicas que en la masterclass no dio tiempo a hacer. Pues ni corta ni perezosa llegó el fin de semana y mi madre toda orgullosa ya me había comprado la tela, había desempolvado la máquina de coser y me puse a ello.
Pues llegó el domingo y ya había hecho tres bolsas más. Con estas bolsas me decanté por hacer un diseño digital para usar la técnica de papel transfer con calor, o comúnmente conocido… Imprimir en un papel especial y planchar el diseño a la bolsa. Y queda muy resultón, no es algo excesivamente caro y da para lucir bolsa hecha a mano o hacer un regalito personalizado y con mucho amor.
SERIE «Florales»
«Ejercicio 1 de exploración cinematográfica de una localización.»
Cuando te proponen el ejercicio de observar un espacio con una mirada cinematográfica, a cada persona se le viene a la cabeza cosas diferentes. Dentro del mundo audiovisual, cada departamento tiene sus necesidades y prioridades.
En mi caso, mi instinto de fotógrafa me obliga a observar la luz, como entra y baña el espacio, en qué dirección va, que dureza tiene, su temperatura… Por otro lado, se me vienen otras cosas a la mente, el departamento de arte que no solo observa y tiene en cuenta la luz sino las texturas que ofrece el espacio, los materiales, los colores, los reflejos, los puntos de luz y muchos ítems más.
Este ha sido un ejercicio muy corto, con una localización escogida prácticamente al azar. Encontrar un espacio con poco potencial estético, parar, observar durante unos minutos y con el móvil grabar aquellos detalles que lo hacen interesante. Un vídeo de un minuto aproximadamente, no hace falta más para encontrar atractivos en un espacio que no lo parecía, pero que puede esconder una historia.
Gotas, la inspiración de un día lluvioso.
Llueve y hace días que no sale el sol.
Las gotas que caen del cielo me atraviesan,
y las siento como cuchillas rasgando mi piel.
Deseo de estallar en mil pedazos
y convertirme en partículas de agua
para bañar al mundo como las lágrimas bañan mi cara.
Eduardo, en Vilaguar a 23 de Abril de 1942.
A mi querida Dolores,
Perdóname porque hace días que no te escribo, he estado ocupado con la apertura de la librería y la mudanza a la nueva casa. Ahora entiendo por qué te encantaba este pueblecito, la panadería de la plaza del ayuntamiento… ¡Dios santo, huele de maravilla! Tenías razón, la gente aquí es muy agradable. La casa nueva tiene un jardín enorme, con un naranjo y dos almendros. Creo que podría montarte el invernadero con el que llevas soñando tanto tiempo. Tengo tantos planes para los dos en esta casa… Estoy eufórico y a la vez triste porque no estás aquí, pero se me pasa cuando pienso en que pronto estaremos juntos.
El día que llegué aquí me vino a visitar Domingo, ya le conoces, me trajo una cesta llenísima de hortalizas de su huerto, un bizcocho delicioso que hizo Carmela, un bote de miel y un dibujo de su nieta, no la reconocerías. Me animó a que adecentara el jardín y se ofreció a echarme una mano si decido plantar lechugas, tomates y rábanos, la verdad que he visitado su tierra y da gusto ver tantos colores y variedades de verduras.
La otra tarde Carmela hizo galletas con uvas pasas y me invitaron a tomar un café. Me estuvieron poniendo al día de los negocios del pueblo y creen que la librería-cafetería prosperará, es más, ya me han puesto en contacto con la mujer del panadero, que es quien se encargará de la repostería para la tienda. También le comenté la idea de montarte un invernadero y Domingo se puso muy contento cuando le pedí que me ayudara. Dijo que llamaría a su sobrino, que vive al otro lado del riachuelo, para que nos ayudara a cargar las maderas. Son una familia muy agradable y te guardan como un precioso recuerdo.
Estuvimos hablando tanto rato que se nos hizo la hora de cenar y no me dejaron irme sin probar el caldo con judías y “la gran patata asada de Domingo”, dice que es su plato estrella. En los postres, les pedí que me contaran cosas de tu infancia, Carmela con lágrimas en los ojos y una gran sonrisa, me explicaba cómo escalabais Camelia y tú los árboles de su jardín y cómo os gustaba comer las cerezas a escondidas.
Domingo me ha dicho que Camelia volverá pronto y quiero reunirme con ella, por ti. Quisiera que vieras alguna fotografía de la pequeña Carla, tiene la misma cara que su madre, es una niña muy dulce.
Después de un par de historias, Carmela se atrevió a enseñarme unas fotografías y al poco estalló en llanto cuando Domingo le sacó la última fotografía que os hicisteis Camelia y tú juntas. Te echan mucho de menos y te recuerdan como si no hubiese pasado el tiempo.
Cuando volví a casa aquella noche, me sentí muy solo y no podía parar de pensarte. Hay momentos en los que me arrepiento de haberte dejado allí, pero esto lo estoy haciendo por nosotros, por nuestro hogar. No quiero que nunca te falte de nada y me reafirmo en ese pensamiento para no entristecerme en esta casa tan grande.
Dolores, te echo tantísimo de menos… Cuando vi a Carmela llorando mientras miraba vuestra fotografía entendí lo que has sido para esa familia y este pueblo. Tomé una buena decisión viniendo aquí, a Vilagua, a tu hogar. Voy a empezar esta vida aquí para ti, pero debo confesarte que hay momentos duros y me inundan pensamientos.
¿Sabes? Creo que no te lo he dicho suficiente, pero adoro el brillo de tus ojos, la melodía de tu risa y el dulce olor de tu pelo. Todas las mañanas cuando me despierto, espero abrir los ojos y verte dormir a mi lado, pero no es así. Cuando me levanto por fin de la cama, espero despertarme con el olor de tu café con tostadas… Amada mía, me enamoraba todos los días, un poco más de ti. Y sigo haciéndolo, sigo enamorándome de ti, a pesar de que no estés a mi lado. Mi amiga, mi estrella, mi vida…
Tengo ganas de volver a reunirme contigo, si todo sale bien, pronto volveremos a estar juntos. Cuando la tienda esté en funcionamiento volveré… volveré a recoger todo lo que nos queda allí y nos vendremos. Para ese día, tendré listo el invernadero, también el jardín arreglado y te pondré aquel banquito balancín en el porche.
Dolores, mi vida, me duele no tenerte aquí, y eso paradójicamente, me hace sentirte cerca. Sé que me fui precipitadamente, pero espero que puedas perdonarme. Contestándote a tu última carta; sí ya hablé con el impresentable de mi jefe. Esa fue una de las razones por las que tomé la decisión tan rápido, nadie va a impedirme hacer realidad nuestro sueño.
Me encanta este pueblo porque es la esencia de lo que tú eres y te devuelve a mi lado por segundos. Solo cuando te pienso se lo que es el amor, pero también reconozco el dolor en mis entrañas. Mi amor, prometo escribirte de nuevo pronto. Tengo muchas cosas que contarte, la tienda me distrae mucho, pero no es suficiente como para superar el dolor de tu pérdida que todavía me pesa enormemente.
Te ama siempre, TU Eduardo.
Texto de Yolanda Ramos
Durante el primer trimestre del 2020 tuve el placer de trabajar con la poeta Rosario Bersabé en su nuevo libro «El dolor del poeta», un poemario que se publicó en Amazon el 5 de marzo del mismo año.
Rosario Bersabé Montes es una gran poeta con seis títulos ya publicados; “De roca y hierbabuena” (2008), “La cruz del verbo” (2010), “El baúl de los sueños” (2013), “Empatía” (2016), “Hilvanando quimeras” (2018) y “La batuta de cristal” (2018).
El libro tiene un precio muy asequible y se puede comprar a través de la página de Amazon. El envío se puede realizar tanto con compra normal, llegando en unos 7 días aproximadamente, como con envío rápido de Amazon Prime, llegando el producto en unos 2 días.
El resumen que se puede leer en la parte trasera del libro es el siguiente, «Para Rosario Bersabé Montes, la poesía es el medio para denunciar los duros golpes que da la vida. “El dolor del poeta” es un grito contra las injusticias que los seres humanos cometen contra sus congéneres. Sobre el injusto reparto de fortuna, de la angustia del hambre de los niños en la tierra, de las barreras entre los hombres, de las desavenencias, de la brevedad del amor, del desamor…»
En este proyecto trabajé con Rosario para la redacción del prólogo de este último libro, así como para el diseño de la portada y la edición para la publicación en la plataforma de ventas Amazon.
Como escribí en la primera página del prólogo “El dolor del poeta” es la expresión y el alma de una persona sensibilizada con la injusticia, con el dolor de una muerte y de un olvido, con la nostalgia que provoca la ausencia de un lugar o un ser querido.»
Leer este libro es una experiencia muy interesante e intensa, donde la poeta expresa el dolor en diferentes vertientes y donde es capaz de emocionarte con sus palabras.
Conclusión final de esta pequeña entrada, lo recomiendo muchísimo.
Video de experimentación en vertical.
Experimentación libre, vídeo experimental
Tema: La nocturnidad y la cultura. LA NOCHE, EL ARTE, EL PLACER
IIOLANDARAMOS 